Desde mi punto de vista, si. De lo que se trata es de superar diferentes escalas de conciencia, de ir adquiriendo sabiduría y riqueza espiritual para que luego, en otras reencarnaciones, revirtamos eso en los demás.
A veces nos tocará recibir ayuda y en otras ocasiones darla. No es un castigo, sino que se trata de la evolución del alma donde se van sumando experiencias y sabiduría para finalmente alcanzar la plenitud.
Nacemos una y otra vez en la tierra hasta llegar a tomar conciencia de nuestra divinidad.
Cuando el alma desea experimentar el mundo físico, acepta entrar en el olvido total de su verdadero ser para redescubrirlo a través de múltiples experiencias.
A medida que vamos abriendo nuestra conciencia a otros planos, iremos comprendiendo el proceso evolutivo.
Todas las vidas tienen lugar en un eterno presente, ya que el tiempo lineal no es así , pero como no lo logramos comprender debemos interpretarlo como vidas sucesivas.
Así el alma se expresa en diferentes momentos y en diferentes personalidades en el plano terrenal.
Después de la muerte física , el alma se dirige al mundo espiritual y llega al plano que le corresponde por su frecuencia vibratoria, allí se encuentra con el grupo de almas con el que ha interactuado a través de varias vidas.
Luego el alma decide regresar a la tierra o seguir su evolución en el mundo espiritual.
La reencarnación nos ayuda a comprender el porqué de nuestras diferencias de destino, estados de conciencia, medio socioeconómico, sufrimientos que nos toca atravesar para que nos acerquemos al amor que somos. Aquí, en el mundo físico, necesitamos experimentar todo, tanto lo agradable como lo desagradable, aún nos cuesta entender , pero poco a poco vamos adquiriendo más sabiduría.
Una vez que se han desarrollado todas las virtudes a través de las distintas vidas, el alma pasa al siguiente plano donde no necesita regresar a la tierra.
